Delirio a la medianoche

 


"Delirio a la medianoche" – De esas cosas en las que piensas cuando tienes fiebre.

Soy una mujer fea. Eso se siente como cuando abres la ducha, sale el agua, es invierno, esa agua helada podría matarte.
Descubrí que soy fea cuando me enamoré. Pero yo soy una mujer fea, no creo que él haya descubierto algo mirándome.
Ayer tenía fiebre alta, eran como las 8 pm. Por eso me bañé con esa agua helada. Tomé una pastilla, me saqué las medias y la chompa, intenté dormir. A las 9 pm desperté sudando. Di varias vueltas en la cama, pensé en muchas cosas y ya eran las 11 pm. Tenía pesadillas y mi cuerpo transpiraba. Veía el techo acercarse hacia mí, me aplastaba, la almohada me trituraba la cabeza y el sudor mojaba todo mi cuerpo. Estaba delirando. Recordaba la mirada de él, su tipo de chica con cejas pobladas, y mis tipos de cejas que no están de moda. Veía mis manos y luego no veía mis manos, sentía mi alma salirse de mi cuerpo, pero debe ser un efecto de la pastilla. Conté mil borregos y no logré dormir.
Quisiera quitarme este calor, pensaba mientras pegaba mi pie a la pata de la cama, que se sentía como una Coca-Cola helada a esa hora y era reconfortante.
Yo era un horno, era un maldito horno de recuerdos.
Hasta las luciérnagas dormían, ya no las escuchaba.
A la media noche ya estaba cansada de dar vueltas. Con algo de esfuerzo me puse a escribir. Agarré el celular y abrí el block de notas. Escribir los pensamientos ayuda a conciliar el sueño. Me dormí.
Hoy en la mañana leí todo lo que había escrito, nada servía para un buen texto y él seguía en mi mente, pero yo no tenía nada. Me puse el termómetro. La fiebre ya había bajado.
*Lu Herrera Vásquez*
Ilustración del artista plástico Juan Ruiz Camacho, pueden encontrar más de sus obras en su página

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